Las dos sagas más populares que protagonizó Sylvester Stallone, Rambo y Rocky, han servido de propaganda estadounidense contra el comunismo en el contexto que fue la Guerra Fría. Con Rocky IV esto es donde más fuerte se pudo el contexto histórico en que se había realizado, enfrascados en el enfrentamiento entre las dos potencias del momento, Estados Unidos y la Unión Soviética.
Ambientada a finales de la Guerra Fría, se muestra la lucha entre el campeón de peso pesado estadounidense Rocky Balboa y el ruso Iván Drago. En aquellos momentos ya las reformas con sentido capitalista de Brézhnev y Gorbachov debilitaron al primer estado socialista.
En la película Rocky representa a los Estados Unidos y Iván Drago a la Unión Soviética. En tiempos de la Guerra Fría estos dos eran las dos más grandes superpotencias tras la II Guerra Mundial tras ser las dos menos destruidas, estos países eran los principales luchadores en este conflicto. En esta película los muestra como se desarrolló el conflicto desde la Guerra de Vietnam, mostrada cuando Rocky estaba a punto de perder, hasta la misma renuncia de Mijaíl Gorbachov en Navidad, representada cuando al final del combate del 25 de diciembre Drago es derrotado.
Debido a que fue hecha por los Estados Unidos nos da una forma en la cual el capitalismo es grande y que es el mejor, mostrándonos sus bondades. Mientras que del comunismo nos muestra todos los problemas que ha tenido y que causaron el fin de esta. Hay que entender además que la URSS de ese tiempo fuera una simple potencia imperialista con vestigios de socialismo, la película es una propaganda anticomunista al irse contra esos vestigios.
Esto se destaca en las escenas de la sesión de entrenamiento donde la película busca vanagloriar las difíciles condiciones en las cuales el sistema capitalista hace sufrir a todo tipo de trabajadores para poder progresar, disminuyendo el trabajo que hace alguien nacido en un estado socialista por tener al estado como su apoyo, cuando el estado no podría ayudar si no fuera del esfuerzo colectivo de los mismos trabajadores, la cooperación entre ellos, diferente a lo que el capitalismo considera impresionante, hacer las cosas por si solo, no dando mucha atención al que consiguió hacer grandes cosas recurriendo a toda la ayuda que podía disponer, pudiendo obtener más fuerzas con ello.
La Unión Soviética cumple en esta película el rol de la derrotada debido a que tras la disolución de esta los Estados Unidos se lanzaron como la potencia vencedora y el más grande país en el mundo asegurando su hegemonía en el mundo. También indica como el pueblo ruso se siente feliz por la caída del comunismo, algo que no es la absolutamente verdad frente a lo que vino luego, la Rusia de los oligarcas y traidores del régimen soviético.
Algo que sí tenemos que aprender los comunistas es en no tener la plena confianza en que nuestro sistema sobrevive fácilmente al golpe del capitalismo, pues hay que darse cuenta, como Lenin lo sabía, que pese a que sea un régimen moribundo, el capitalismo sigue vivo y actúa de forma cada vez más violenta para impedir su fin.
Los pueblos de la Unión se confiaron y dejaron que una camarilla de oportunistas poco a poco desmantele el sistema y lo hagan con el paso del tiempo un estado imperialista, luego en crisis y finalmente 13 estados firmemente capitalistas, permitiendo esto porque no llegaron a tener la educación política suficiente para entender lo que realizaban estos oportunistas.
Un dato curioso es que haya sido este enfrentamiento precisamente el 25 de diciembre, dando dos posibilidades de esta coincidencia a mi percepción. Por un que haya sido planeado por alguien sea Gorbachov o Yeltsin, que el fin soviético sea en el tiempo que indicó la película hecha en 1985, ya sea para que coincida con la película o para que el día del fin este cerca del 30 de diciembre (Dia de la Creación de la URSS), cosa que también pudo ocurrir en la película.
Modificada el 9 de junio de 2019