Juventud Revolucionaria

miércoles, 23 de agosto de 2017

La Gran Guerra Patria: La Lucha de la Unión Soviética contra el Fascismo


«La victoria de la URSS en la guerra fue posible porque todo el pueblo ruso se mantuvo unido alrededor del Partido Comunista y fue movilizado para la guerra. El pueblo ruso fue un arma cien veces más poderosa que todos los “panzer” alemanes, que todas las divisiones nazis.» (Comité Central del PCE (m–l), 1979)
Aunque la Gran Guerra Patria y la Segunda Guerra Imperialista Mundial puedan entenderse como lo mismo, la diferencia esta en que la Gran Guerra Patria fue la lucha del pueblo soviético contra las fuerzas fascistas que intentaban ocupar su patria, una patria diferente, la patria de los trabajadores. Se torno en una lucha en defensa de la nación  y el socialismo. Esto dentro del contexto de la II Guerra Mundial que fue la lucha causada por un nuevo choque de interés de las burguesías, que con su apaciguamiento habían previsto que la Unión Soviética fuera invadida primero por Hitler.

Preparativos

En 1939 la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas había buscado el crear una alianza militar con los países Francia y el Reino Unido para derrotar a la Alemania de Hitler, pero estos estados burgueses no aceptaron ninguna alianza con la URSS para acabar con el fascismo, ya que  buscaban que el nazi-facismo acabe con la patria socialista, eliminando el primer ejemplo de estado socialista. Ante esta negación por parte de los regímenes democrático-burgueses, el gobierno soviético tuvo que realizar un pacto de no agresión con el enemigo nazi-fascista en búsqueda de tiempo para crear una fuerza que aplaste el ataque alemán. Los alemanes buscaron el pacto y el 28 de agosto de 1939, los ministros de Relaciones Exteriores soviético y alemán firmaron el Pacto Molotov-Ribbentropp con el cual la URSS obtuvo tiempo para reforzar la fuerza militar del Ejército Rojo.

El 1 de septiembre Polonia era atacada por la Alemania fascista. En este momento voy a indicar un error mayormente puesto dentro de la historiografía burguesa, la supuesta invasión soviética a Polonia, la cual no sucedió ya que cuando el Ejército Rojo entro en Polonia, el gobierno de este país había caído ante la barbarie nazi-fascista y la URSS decidió tomar el territorio restante de Polonia que de haber continuado existiendo el estado polaco hubiera estado protegido por el pacto de agosto de 1939, pero sin un gobierno se tuvo que realizar un nuevo tratado en septiembre de 1939. Esto se demuestra cuando la Unión Soviética recién entrar en Polonia el 17 de septiembre cuando los alemanes ya la habían invadido el primero de ese mes. Eso lo supo todo el mundo en 1939 incluidos Rydz-Smigly y Ignaz Moscicki importantes líderes del extinto gobierno polaco, siendo el último de estos el que al huir a la neutral Rumanía el 17 septiembre provoco el fin del gobierno polaco, siendo el mismo día que la URSS llego a mantener a los alemanes fuera de la zona oriental de Polonia teniendo oficialmente un paso libre dado por las máximas autoridades polacas que no ordenaron atacar al Ejercito Rojo.

Firma del Pacto Molotov-Ribbentropp

Los pueblos de Europa sufrieron del error de sus gobernantes que se vieron en vergüenza ante el avance de las divisiones alemanas que tomaron el control de toda Europa ejecutando toda oposición a su autoridad. Mientras en la Unión Soviética se continuo con el proceso de industrialización y el reforzamiento de la fuerza militar soviético, siendo en el marco del Tercer Plan Quinquenal (1938–1942) que se pusieron en explotación 2.900 nuevas fábricas e instalaciones industriales. El armamento de la Unión Soviética fabricado entre 1939 y 1940 constaría de nuevos modelos de aviones de caza (“Yak 1”, “Mig 3” y “LAGC3”), así como prototipos de aviones de asalto “Il–2” y el bombardeo en picado “Pe–2”. A la vez se construyeron carros de combate de los cuales destacan el “KV–1” y el “T–34”, considerados los mejores tanques del mundo, y comenzó la fabricación en serie vehículos lanzacohetes “Katiuska”. Entre enero de 1939 y junio de 1941, la artillería recibió 92.578 piezas; la Fuerza Aérea fue equipada con 17.745 aviones de combate y el Ejército recibió más de 7.000 tanques.
«El Ejército Rojo y la Marina Roja, venciendo innumerables dificultades, luchan abnegadamente por cada palmo de tierra soviética. […] Nuestra resistencia frente al enemigo crece y se hace cada vez más tenaz.» (Stalin, Discurso Radiado del Presidente del Comite de Defensa del Estado, 1941)

Invasión a la URSS

En 1941, tras no haber logrado acabar con la resistencia británica a la agresión germano-fascista decidió iniciar el 22 de junio con la Operación Barbarroja contra la Unión de Repúblicas Socialista Soviéticas con la cual avanzarían de manera rápida al inicio gracias a las ventajas obtenidas al realizarlo por sorpresa y con tropas que se encontraban ya en la frontera germano-soviética esperando las ordenes, mientras el Ejército Rojo tenía que movilizarse hacia la frontera. Stalin llamo a la población a defender la patria socialista ayudando al Ejercito reorganizando la labor para los momentos de guerra, mientras en las zonas ocupadas se utilizarían métodos como «[…] organizar destacamento de guerrilleros, a pie y a caballo, formar grupos de sabotaje para la lucha contra las unidades del ejército enemigo, para encender en todas partes la guerra de guerrillas […] hay que crear condiciones insoportables para el enemigo [...]» (Stalin, Discurso Radiado del Presidente del Comite de Defensa del Estado, 1941), método que sería utilizado en territorio invadido por el fascismo, inclusive alentando movimientos guerrilleros en Albania y Yugoslavia.
«La finalidad de esta guerra patria de todo el pueblo contra los opresores fascistas no se reduce únicamente a la conjuración del peligro que se ha cernido sobre nuestro país, sino que implica la ayuda a todos los pueblos de Europa que gimen bajo el yugo del fascismo alemán» (Stalin, Discurso Radiado del Presidente del Comite de Defensa del Estado, 1941)
Las tropas alemanas habían llegado a las cercanías de Leningrado y Moscú, pero a pesar de eso Stalin continuo en Moscú ayudando a aumentar la moral del pueblo soviético que lucho por la continuidad del socialismo. Durante el año de 1942, la fuerza del Ejército Rojo que no se había cedido a la barbarie nazi-fascista y su guerra relámpago (Blitzkrieg), que no sirvió en un país enorme como la URSS. En Moscú, el Ejército Rojo envió a los alemanes a dispersarse en diciembre de 1941 siendo expulsado en enero de 1942 a una distancia entre 100 y 250 kilómetros, causando graves pérdidas a sus 38 divisiones y liberando más de 11.000 poblados. En Leningrado la situación fue más difícil, la ciudad fue rodeada por el enemigo alemán, pero la ciudad resistió teniendo su única conexión al exterior por el Camino de la Vida por donde se enviaron víveres a una ciudad que era bombardeada por el fascismo.


«Tuve la posibilidad de estudiar a fondo a Stalin como estratega militar, porque hice toda la guerra junto a él. Stalin dominaba los problemas organizativos inherentes a las operaciones de frentes enteros o grupos de frentes y dirigía estas operaciones con pleno conocimiento, porque era competente también en las grandes cuestiones estratégicas.» (Zhúkov)
Stalin junto a Gueorgui Zhúkov se encargaron de la estrategia militar para derrotar al enemigo alemán, organizando la lucha mientras Hitler busco formas para dañar la moral de los pueblos de la URSS y en el verano de 1942 se acerca a las reservas petroleras del Cáucaso, las regiones agrícolas del Don y la cuenca del Kubán, necesarias para que se sostenga la lucha soviética. Hitler originalmente ordeno un ataque al este de Stalingrado tomando una posición firme en el Volga, pero el 23 de julio decido dividir su ejército y enviar un grupo a Stalingrado y otro hacia las reservas de petróleo, sin embargo, no logro concretar sus planes gracias a la resistencia de la ciudad de Stalingrado, que bajo la orden de no dar ni un paso atrás combatieron calle por calle la agresión. El 19 de noviembre el Ejército Rojo dio inicio a la contraofensiva con la cual rodearon al ejercito del general Paulus, el cual tuvo que rendirse, marcando este hecho el inicio del fin del nazismo.
« […] el Ejército Rojo y sus aguerridos cuadros se han desarrollado hasta convertirse en una seria fuerza, capaz no solo de resistir a la presión de las tropas germanofascistas, sino también de derrotarlas en el campo de batallas y obligarlas a retirarse» (Stalin, Informe del Presidente del Comité de Defensa del Estado en el 25 Aniversario de la Gran Revolución Socialista de Octubre, 1942)   

Liberación de Europa

Para 1943 los nazis lanzarían su último ataque contra el pueblo soviético en Kursk iniciando el intento de defender el territorio conquistado, acto en el cual fracasaron. En Leningrado se acabaría el sitio, mientras se liberaba el territorio de la URSS, expulsándolos de casi un millón de km2, dos terceras partes de la tierra ocupada por Hitler. En agosto de 1944 la Unión Soviética ya estaba completamente libre del germano-fascismo, pero en su sentido de solidaridad internacionalista, continuo la lucha para liberar a los pueblos oprimidos por Hitler, los soviéticos lucharon en Rumania y Polonia.

Tropas sovieticas con banderas capturadas del Ejercito Alemán

Ya para esos días los estadounidenses y los británicos habían entrado en Europa debilitando aún más al imperio de Hitler que tendría que lidiar con la guerra de dos frentes, en la cual el 16 de abril de 1945 los soviéticos entran en Berlín causando que Hitler, por su cobardía e histeria, se suicide el 30 de abril, flameando la bandera roja en el Reichstag de Berlín.

Así fue como el coraje del pueblo soviético, hijos del socialismo, liberaron al mundo de una de los más degenerados rostros del capitalismo. Esto logrado junto con su líder Stalin, al quien los historiadores burgueses y los revisionistas de Kruschev intentaron quitarle su mérito en una de las guerras que salvo a la humanidad de aquella barbarie ultraderechista con la cual pretendieron los capitalistas dar un golpe a la construcción del socialismo, pero lo que hicieron es demostrar sus logros con la victoria de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas en Berlín.
« […] la “Gran Guerra Patria” […] se calcula que combatieron algo más de nueve millones de soldados soviéticos, concediéndose la medalla de Héroe de la Unión Soviética a once mil combatientes de 69 etnias, al Mariscal Zhukov y dos pilotos de guerra. El Soviet Supremo aprobó entregarla a Stalin y éste se opuso arguyendo que estaba destinada exclusivamente a proezas extraordinarias en el campo de batalla. […] » (Andocilla, 2017)

Bibliografía

Andocilla, M. (8 de Marzo de 2017). A propósito de Stalingrado. Obtenido de Periódico Opción: http://periodicopcion.tk/index.php/mundo/660-a-proposito-de-stalingrado
Comité Central del PCE (m–l). (Julio de 1979). Stalin, Biografía Politíca (Comité Central del Partido Comunista de España (Marxista – Leninista) ed.). Madrid, Madrid, España: Vanguardia Obrera.
Hermida, C. (Octubre de 2007). El Pacto Germano–Soviético. Unidad y Lucha(15), 144.
La batalla de Moscú: el fracaso de la guerra relámpago nazi en la URSS. (9 de Mayo de 2015). Obtenido de Sputnik Mundo: https://mundo.sputniknews.com/europa/201505091037196828/
Leningrado, el heroísmo de un pueblo asediado. (9 de Mayo de 2015). Obtenido de Sputnik Mundo: https://mundo.sputniknews.com/europa/201505091037202493/
Stalin, J. (31 de Julio de 1941). Discurso Radiado del Presidente del Comite de Defensa del Estado. En La Gran Guerra Patria de la Unión Sovietica (pág. 132). Moscú, Union Sovietica: Editorial Partenon. Obtenido de Partido Comunista de España (Marxista-Leninista).
Stalin, J. (1942). Informe del Presidente del Comité de Defensa del Estado en el 25 Aniversario de la Gran Revolución Socialista de Octubre. En La Gran Guerra Patria de la Unión Sovietica (pág. 46). Moscú, RSFS de Rusia, Unión Sovietica.
Stalingrado, la contienda que selló el destino del nazismo en Europa. (9 de Mayo de 2015). Obtenido de Sputnik Mundo: https://mundo.sputniknews.com/europa/201505091037202097/

Zhúkov, G. (s.f.).

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