Cinco Décadas desde que
un Golpe de Estado militar terminó con el primer gobierno socialista
democráticamente electo en el planeta. Salvador Allende consiguió en 1970
vencer a las opciones de la derecha y el imperialismo, asi como a sus grandes
chequeras y maquinarias electorales. Lamentablemente, el 11 de septiembre de
1973, Chile vivió un día que demostró que la paz no es una opción mientras siga
en pie los enemigos del pueblo.
La dictadura de Augusto
Pinochet se erigió, terminando y silenciando brutalmente los anhelos de una
sociedad diferente. Tras la dictadura el recuerdo de Allende volvió fuerte, las
esperanzas de cambio despertaron con el Estallido Social, pero tras el gobierno
de Gabriel Boric, hay quienes se preguntan si Pinochet tuvo razón.
- Véase También: 11-S Chileno
Chile de Antes
Siempre que llega algún
gobierno progresista o de izquierda a un país, el pasado es visto desde unos
ojos nostálgicos. Cuba era un paraíso, pero solo para los turistas; Argentina a
punto de ser potencia mundial pese a que lo único que consiguieron de la II
Guerra Mundial fueron prófugos de la justicia. La derecha le da presencia
mediática a estas ideas.
La Chile de los años
1960 no era un paraíso. Como el resto de Latinoamérica, no era un estado con una
gran industria, su economía era y es dependiente a recursos naturales como el cobre. Todos
los gobiernos hablaron de nacionalizaciones y la reforma agraria, buscando apaciguar a las masas populares tras el triunfo de la Revolución Cubana en
1959, siguiendo los lineamientos de la Alianza para el Progreso, pero sin llegar a grandes resultados.
En 1960 había sucedido
el terremoto de Valdivia. El gobierno de Jorge Alessandri hizo del Mundial de
1962 la herramienta para elevar ánimos, fortalecer el sector turístico y
estrenar la televisión. En 1964, la Agencia
Central de Inteligencia (CIA) financio más de la mitad de la campaña de Eduardo
Frei, ya desde ese tiempo al imperialismo le preocupaba la llegada de Allende
al gobierno.
El Gobierno de la Unidad Popular
En Chile ya se venía
haciendo acciones parecidas a estas desde las reformas de la constitución en
1967, donde se abrirá paso para una reforma agraria, algo que sería común en
Latinoamérica sin necesariamente ser gobiernos socialistas. Con Allende en el
poder se dio el gran salto en las nacionalizaciones, siendo estatizada la banca,
la de las minerías de cobre y de demás empresas claves de la economía chilena.
Esta política le valió
los reclamos de la patronal que perdía sus propiedades, sin embargo, estas
nacionalizaciones no llegaron a ser totales, continúo existiendo un sector
privado, tal como indicaban los acuerdos con la Democracia Cristiana (DC). Igualmente,
en Chile se garantizó los intereses de un grupo de accionistas. Más bien, la organización
de los trabajadores y campesinos fue la que aprovechó la situación para expulsar
a la burguesía y los terratenientes más allá de lo que buscó el gobierno de Allende.
Se registraron 1450 ocupaciones de tierra conseguidas por la acción de los mismos
campesinos.
La importante industria
del cobre fue nacionalizada totalmente el 11 de julio de 1971 con la fundación
de Corporación Nacional del Cobre (Codelco), tras las reformas de anteriores
gobiernos donde el estado comenzó a comprar acciones de las empresas mineras.
La reducción de las
tasas de intereses que busco que los recursos lleguen a todos los chilenos y la
estatización de la banca. Allende sabia que el “1,3 por ciento de los deudores
del sistema acaparaba el 45,6 por ciento del crédito”. Allende conseguiría que
la Corporación de Fomento de la Producción (CORFO) obtuviera una participación
mayoritaria en 14 bancos y poco menos de 30% de 5 bancos.
El imperialismo también
salía golpeado, ya sea porque se quedaron sin las ganancias conseguidas de la extracción
del cobre o por la renegociación de la deuda. Desde noviembre 1971, Allende
expresó este interés, suspendiendo parcialmente los pagos a las deudas
contraídas con Europa, Estados Unidos, Canadá y Japón. El imperialismo yanqui disgustado, y como parte del proyecto FUBELT, impidió que Chile obtenga nuevos prestamos de los bancos internacionales en todo el gobierno de Unidad Popular.
Los tibios pasos
permitieron que los afectados, la burguesía mantenga un poder que les permitió iniciar
el sabotaje donde habría acaparado y suspendido la producción buscando desestabilizar al regimen. Con esto se mostraba la continuidad del capitalismo en el interior
del país, a la vez respaldada por Estados Unidos y chocando con las políticas socialistas de la Unidad Popular (UP). Pese a este acaparamiento, los ricos del país se dignaron a llamar a una marcha de las cacerolas vacías y otras manifestaciones del tipo, pese a ser los que más tienen y los responsables.
A todas las medidas se
agrega la política de imprimir nuevos billetes, acto producido a raíz de caída del precio del cobre. Para impedir que los
precios aumenten por la desvaloración de la moneda, estos se hallaban
congelados, pero los productores se negaban a entregar sus productos para no
perder las utilidades, acción facilitada por la inacción de la fuerza pública. Frente
a ello surgió un mercado negro donde se ignoró el congelamiento de precios,
resultando difícil comprar los insumos básicos con una moneda desvalorada.
La Fuerzas Armadas,
consideradas desde óptica revolucionaria como el órgano de represión de la
burguesía, seguían activas. El gobierno había considerado que el Ejercito se mantendría
fuera de la política, siendo esta su única opción puesto que su llegada al
poder no había surgido de la lucha armada sino de unas elecciones a lo que se
suma que el Partido Comunista (PCCh) estaba abandonando la vía violenta al
socialismo por una “vía pacífica” y el Partido Comunista Revolucionario (PCR),
nacido del rechazo a estas posiciones revisionistas, no dio respaldo al régimen
igualándolo a los gobiernos anteriores y alejándose de las masas populares que respaldaban
a la UP.
Pese a todo, el apoyo a
la Unidad Popular aumentó un poco. La elecciones de 19973 le dieron un 43,3%
de la votación a UP, encima de 36,5% de los votos conseguidos por Allende en
1970. Sin embargo, no consiguió la mayoría absoluta. El 22 de agosto de 1973,
la Cámara de Diputados declara inconstitucional al gobierno de la Unidad
Popular y llama a las Fuerzas Armadas y Carabineros a derrocar al régimen.
El 11 de septiembre de 1973, las Fuerzas Armadas se sublevaron, los civiles pidieron armas al gobierno para actuar ante el golpe, pero el gobierno no actuó y el golpe triunfo. Allende fallecería en el Palacio de la Moneda y más tarde miles de chilenos le seguirían, asesinados por la dictadura más sanguinaria de América Latina. Augusto Pinochet, aquel que Allende había nombrado comandante de la Fuerzas Armadas, daría paso al neoliberalismo. Los derechos del pueblo y el Estado retrocederían incluso más de lo que existía antes de Allende.
- Véase También:
Legado de Allende
La naturaleza reformista se debió a que Unidad Popular no era un partido político, sino una coalición de izquierda entre socialdemócratas, comunistas y demás fuerzas de izquierda que llevó a Chile por lo que se consideró como el punto en común entre estas ideologías, surgiendo así la “vía chilena al socialismo”. Chile fue sumergido en dificultades por una inadecuada forma de lidiar la situación por parte del gobierno de Allende que no reacciono con la fuerza suficiente frente a los enemigos de los trabajadores.
Es verdad que el sabotaje y aislamiento impidió la llegada de las nuevas tecnologías requeridas para el avance del país, y si, esto fue de mucha ayuda para su declive. Es verdad que la intervención estadounidense dirigida por Henry Kissinger y el proyecto FUBELT ayudaron a acabar con el régimen de Allende, pero no hubiese tenido tanta facilidad Estados Unidos para ejecutar la operación si no fuera por las fallas de este. Fallas que son necesarias de revisar para impedir que vuelvan a ocurrir.
El socialismo no puede conseguir sus objetivos mientras el capitalismo siga existiendo, más aún si el gobierno popular le deja a la burguesía seguir con su lucro. Hasta hoy Cuba ha podido lidiar el bloqueo y las dificultades de ser excluidos de la economía global. La Unión Soviética consiguió ascender a potencia mundial, aunque no puedo enfrentar el surgimiento de intereses particulares y excesos dentro del propio Partido Comunista que fueron descomponiendo el socialismo.
Nadie ha dicho que construir
el socialismo es fácil, ninguna revolución lo ha sido. Cambiar el esclavismo
por el feudalismo requirió de décadas de lucha entre Roma y sus esclavos, el
paso de feudalismo al capitalismo esta lleno de guerras y revoluciones sangrientas.
Un Nuevo Pacto Social o un gobierno de tintes progresistas no son suficientes para cambiar la sociedad, es necesario la organización de los trabajadores,
terminar con la inequidad y el capitalismo en sí.
Hoy el legado de Allende sigue en quienes con su ejemplo siguen buscando una nueva sociedad. Quienes entienden sus errores y aprenden de ellos, entienden lo importante de participar en elecciones y enfrentar a los capitalistas en su cancha, sin abandonar la lucha revolucionaria. El PCR de Chile ha reconocido sus fallos durante el régimen de la Unidad Popular, su aislamiento de las masas que se encontraban dispuestas a luchar. En Ecuador, tras la desaparición legal del Movimiento Popular Democrático, miembros de esta organización adoptaron el nombre de Unidad Popular para ampliar las masas y hacer al pueblo llegar al gobierno.
Claro hay quienes dicen
seguir su ejemplo mientras lo buscan es integrarse en la clase alta de sociedad
capitalista. Habló de los gobiernos “progresistas” surgidos en el siglo XXI,
quienes hablan de un nuevo socialismo mientras fomentan privatizaciones en Ecuador,
se siguen endeudan con los imperialistas en Argentina o usan a la caja del
Estado como su fortuna personal en Venezuela.
En Chile, Gabriel Boric
ha ido abandonado las políticas de izquierda y acercándose a la derecha,
acelerando esta deriva tras la derrota del Referéndum Constitucional. Hoy, deja
que la fuerza publica reprima a quienes conmemoran a las víctimas del golpe de estado
a Allende, quienes recuerdan al gobierno de la Unidad Popular, mientras el
fascismo acumula fuerzas.
Pinochet no tenia más razón para
torturar y masacrar a los trabajadores que la que le daba los intereses de la burguesía
y el imperialismo, que pese a una política poco agresiva a sus deseos, no
dudaron en traer la dictadura para quedarse con todo. Quizás Chile es el país más
próspero en Latinoamérica, pero también el más desigual, donde las grandes
empresas dominan hasta la educación y la salud, una realidad cruda adornada por
la modernidad.
- Véase También:
Bibliografía
Briones, R., & Bosselin, H. (23 de Agosto de 2013). 40 años del
acuerdo de la Cámara que declaró la ilegitimidad del Gobierno de Allende.
Obtenido de El Mostrador:
https://www.elmostrador.cl/noticias/opinion/2013/08/23/40-anos-del-acuerdo-de-la-camara-que-declaro-la-ilegitimidad-del-gobierno-de-allende/
Del Barrio, J. M. (26 de Noviembre de 2016).
La coalición de izquierda en Portugal se afianza tras un año de
estabilidad. Obtenido de El País:
https://elpais.com/internacional/2016/11/26/actualidad/1480191566_577866.html
Doxrud, J. (16 de Abril de 2016). La
política económica de Salvador Allende y la Unidad Popular. Obtenido de
Liberty and Knowledge:
http://www.libertyk.com/blog-articulos/2016/4/16/la-poltica-econmica-de-salvador-allende-y-la-unidad-popular
Gómez Leyton, J. C. (7 de Junio de 2017). La
democratización del derecho de propriedad en Chile. Obtenido de Rebelión:
http://www.rebelion.org/noticia.php?id=227478
Marx, K. H., &
Engels, F. (1848). Manifiesto
del Partido Comunista.
Londres, Inglaterra, Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda.
Mauricio. (2009). La estatización de la
banca: una discusión necesaria e inmediata. Obtenido de El Ciudadano:
https://www.elciudadano.com/economia/la-estatizacion-de-la-banca-una-discusion-necesaria-e-inmediata/09/28/
Sánchez, L. (1 de Diciembre de 2018). El
fin de la 'geringonça': los socialistas de Portugal buscan divorciarse de su
'Podemos'. Obtenido de El Confidencial:
https://www.elconfidencial.com/mundo/2018-12-01/portugal-coalicion-izquierdas-ano-elecciones_1678514/
Tejeda, A. (15 de Agosto de 2008). Enfrentó
Allende una “política deliberada” de sabotaje, indica Luis Hernández Navarro.
Obtenido de La Jornada:
https://www.jornada.com.mx/2008/08/15/index.php?section=mundo&article=031n1mun
Telesur. (11 de Septiembre de 2018). El
Chile de Allende. ¿Cuál fue la importancia de los cordones industriales?
Obtenido de Resumen Latinoamericano: http://www.resumenlatinoamericano.org/2018/09/11/el-chile-de-allende-cual-fue-la-importancia-de-los-cordones-industriales/
Unidad Popular. (17 de Diciembre de 1969). Programa
de Unidad Popular - La construcción de la nueva economía. Obtenido de
www.abacq.net: http://www.abacq.net/imagineria/frame5b.htm
No hay comentarios.:
Publicar un comentario